El tamaño de su carga
Este puede ser el elemento más resaltante que diferencie los dos tipos de lavadoras, y es que sin duda alguna. Sobre todo, porque la mayoría de las personas no sabe que cuándo una lavadora doméstica te dice “máximo 60 kilogramos” habla del peso de la ropa mojada, no seca. Sin embargo, las lavadoras industriales indican el peso de la ropa en seco, lo que significa que con facilidad pueden triplicar las cargas.
Lo que es capaz de trabajar
Las lavadoras domésticas se hayan diseñadas para cumplir con un máximo de tres ciclos diarios, sin embargo, las lavadoras industriales se diseñaron para trabajar por ciclos de entre 12 y 14 horas diarias con un rendimiento máximo. Así que, en esencia, una lavandería industrial tiene equipos de lavado diseñados para permanecer horas y horas en constante trabajo, algo que dañaría rápidamente a las lavadoras domésticas.
La cantidad de agua que se emplea
Este es un punto a tomar muy en cuenta, sobre todo para el público, ya que en los países europeos el agua suele ser bastante costosa. En promedio, una lavadora doméstica puede consumir 150 litros de agua por ciclo y sí es una lavadora antigua, puede ser muchísima más agua, lo que significa un gasto enorme. Mientras que las lavadoras industriales apenas alcanzan los 90 litros, aunque están sujetas a su tamaño y al volumen de ropa que soporten.
La reparación y mantenimiento
Aquí vemos una diferencia vital, sobre todo para aquellas personas que no disponen de mucho presupuesto. Primero, se debe entender que uno de los electrodomésticos que está diseñado para durar muchos años es la lavadora. No es normal escuchar que alguien mencione que a lo largo de su vida compro 10 o 20 lavadoras. Por tanto, son equipos duraderos, sin embargo, para maximizar su duración se requiere de mantenimiento y lo siento es que las lavadoras domésticas suelen ser costosas, más si se requiere repararlas, pues las piezas pueden llegar a ser más costosas que el propio electrodoméstico.
Contrario a ello, las lavadoras industriales tienen repuestos más genéricos y, como están diseñadas para largas jornadas de trabajo, sus piezas vienen reforzadas; más práctico aun: sus piezas se consiguen con tanta facilidad que suelen ser económicas, mucho más que las domésticas.
El precio de compra
Las lavadoras industriales suelen ser mucho más costosas que las lavadoras domésticas, no sólo por su tamaño, sino por el material con el que se fabrican que es de alta duración y su capacidad de carga. Así que, sino dispones de un presupuesto holgado, tu mejor opción siempre será una doméstica. Ahora que sabes todo esto ¿con cuál electrodoméstico te quedas? ¿con una lavadora industrial o la doméstica? Déjanos tu respuesta en los comentarios.