El fondo y las paredes de tu piscina deben limpiarse
Siempre debes realizar una limpieza completa de tu piscina, por lo menos una vez cada quince días. Para ello, lo primero es vaciar todo el contenido que tenga de agua y aplicar un limpiador que sea desinfectante de lozas, así, con un cepillo especial, podrás dejarlo actuar en las paredes y fondo.
Luego, podrás restregar cada rincón de tu piscina y vuelves a dejarlo actuar unos minutos. Por último, enjuaga con abundante agua. Ah, claro, en este punto no olvides que los limpiadores a presión pueden a ser tu vida más fácil, pero también pueden dañar tu piscina haciendo que se gresite. Así que no los escojas.
El sistema de filtrado es vital
Algo clave del sistema de filtrado es que debe limpiarse siempre que se pueda, ya que es un elemento que actúa como una depuradora. Es decir, evita que trazos de vidrio, arena u otros materiales puedan llegar al agua de la piscina y puedan dañarte.
Así que asegúrate de limpiarlos con guantes para evitar riesgos de cortes y no los reconectes hasta que los skimmers, que realmente son los que toman toda el agua y la filtran, estén limpios.
Vuelve a rellenar tu piscina
Una vez tengas todos los pasos anteriores logrados, es momento de que compruebes que la válvula del fondo se halle completamente cerrada y volver a llenar toda tu piscina. Eso sí, si vas a emplear cloro en ella, acuérdate de añadirlo para tratar el agua cuando vayas a la mitad del rellenado.
El pH de tu piscina es algo que no puedes ignorar
Un pH muy alto puede afectar tu piel y ojos, irritándolos, causando incluso ligeras quemaduras, disminuyendo el efecto desinfectante d ellos elementos y empeorando la aparición de floculación. En cambio, un pH muy bajo, también irritaría la piel, empeoraría la floculación ¡y corroería cualquier metal que estuviera en tu piscina!
Así que sí, es básico que mantengas tu pH entre 7,2 y 7,6. Para ello, necesitarás comprar un medidor de pH y realizar pruebas cada vez que desees bañarte. Por suerte para ti, sí el pH está muy bajo o muy alto, sólo tienes que aplicar elevadores o reductores de pH que te venderán en cualquier tienda para piscina.
Eso sí, jamás los apliques a través del skimmer o lo dañarás. La forma correcta es verterlo directamente en el agua de tu piscina. Ahora que sabes todo esto ¿qué opinas? ¿sabías que tu piscina necesitaba de tanto mantenimiento? Mejor aún, ¿Te conoces algún otro consejo de mantenimiento de piscina que hallamos omitido aquí?
Si la respuesta es sí, no dudes en dejárnoslo en los comentarios. Si no, déjanos cuál ha sido tu experiencia más divertida en cualquier piscina de hotel.